No es ningún secreto que la situación del comercio internacional y las exportaciones españolas durante el covid-19 está en recesión. La crisis sanitaria ha afectado a factores tan importantes como el intercambio de documentos a nivel mundial o el traspaso de mercancías entre países, lo que ha terminado afectando a las posibilidades productivas de las empresas.
El PIB de España cayó en el primer trimestre de 2020 un 5,2% respecto al mismo periodo de 2019. El gasto de los hogares y la inversión, dos de los pilares más fuertes de nuestra economía, también sufrieron recesos históricos con un 7,5% y un 6,7%. Pero uno de los datos más preocupantes es, precisamente, el de las exportaciones españolas, que retrocedieron un 6,3% frente al primer trimestre de 2019.
Sin embargo, no todos los datos son negativos. La cara positiva de esta nueva situación es que España ha fortalecido mucho la base exportadora real con las exportaciones continuas de bienes y productos frente a los servicios. Los sectores farmacéutico, químico y agroalimentario han mantenido su actividad, proporcionando un ligero colchón para frenar el gran impacto del coronavirus.
Los efectos del covid-19 en las exportaciones
El hecho de que el covid-19 comenzara en China y se desplazara lentamente a Europa ha provocado que la crisis haya tenido un golpe económico distinto en cada país y en cada región.
En España, el sector primario ha conseguido mantenerse e incluso crecer por encima de la media del año pasado. Ese es el caso de Sevilla, una provincia que cerró el mes de abril con un superávit de 285 millones de euros, producto del crecimiento en la venta exterior de frutas y productos de cuidado personal como jabones o ceras.
Lo mismo ha sucedido con el sector porcino de Cataluña, que en julio ha logrado mantener márgenes de beneficio elevados por las transacciones comerciales con China. Uno de los grandes retos del Gobierno es precisamente ese, el de evitar que la agroalimentación y el consumo desciendan ahora que ha surgido la época de los rebrotes.
En Castilla-La Mancha, las exportaciones crecieron un 0,4% de enero a mayo, frente a las mismas fechas del año pasado; sobre todo en productos de alimentación (que generaron 622 millones de euros) y bienes de equipo. En el resto del año esta estadística ha tendido a la baja, y el sector del vino es el que más afectado ha resultado con una caída del 5% respecto a 2019.
Una de las industrias más importantes que se ha recuperado después de varios meses a la baja es la de los automóviles, que a pesar de haber reducido en un 50% sus exportaciones, logró en mayo una balanza comercial de 550 millones de euros. Esto es así porque el número de exportaciones de coches y motos superó con creces al de importaciones.
Las oportunidades de las empresas para aumentar sus exportaciones durante el covid-19
Aunque el virus del covid-19 ha tenido un impacto considerable en las exportaciones, es cierto que en este medio año han surgido nuevas oportunidades para aprovechar en el mercado internacional.
El primer paso para poder exportar a otros países en estos meses es trabajar a fondo en dos conceptos imprescindibles: diversificación y digitalización. El primero de ellos nos permite disponer de varios puntos de producción y distribución en el caso de que surjan rebrotes en zonas delicadas. El segundo de ellos es fundamental para mantener contactos fluidos con empresas del extranjero y lograr un buen nivel de promoción internacional.
En cuanto a los mercados en los que podemos poner el ojo para las exportaciones, tenemos países como China, Japón o Corea del Sur, que parecen haberse recuperado de los efectos más devastadores del coronavirus. En Europa, Portugal, Grecia e Irlanda han tenido algunos de los índices más bajos de contagio y presentan buenas oportunidades para cualquiera de los tres sectores.
Algo parecido sucede en Latinoamérica, donde Argentina y Uruguay parecen haber contenido la pandemia. En África y Norteamérica debemos tener cuidado, porque en algunos países como Estados Unidos o Sudáfrica el impacto económico ha sido más devastador.
En general, es conveniente echar un vistazo al gráfico de contagios a nivel mundial antes de decidir a dónde llevar nuestras exportaciones. Existen muchos otros factores, como los trámites aduaneros y la documentación oficial, que también afectan a la decisión final, así que intenta analizar dónde tus productos pueden tener un mayor calado dependiendo de los sectores que más hayan resistido el envite del covid-19 en cada país.
