Los castillos de Castilla-La Mancha han sido unos de los mayores protagonistas de la historia de nuestra región. Todos y cada uno de ellos nos trasladan a épocas muy lejanas y en numerosas ocasiones nos trasmiten la esencia de nuestros orígenes. Estos castillos tienen un gran potencial como lugar de interés turístico y por ello queremos este pequeño espacio a los Castillos más importantes de Castilla-La Mancha.
En Globalcaja estamos totalmente convencidos de la importancia que tiene el patrimonio histórico-artístico de nuestra tierra manchega. Si lo que quieres es viajar al pasado y revivir las batallas que tuvieron lugar en estos espectaculares escenarios, solo tienes que organizar una ruta y visitar estos Castillos. Un plan rural y cultural ideal para este verano que no puedes dejar lado.
-
Castillo de Alcalá del Júcar (Albacete)
Con unas vistas espectaculares, estamos ante un ejemplo de arquitectura islámica. Los restos de su muralla reflejan los diferentes asentamientos de romanos e íberos y otras historias muy antiguas que nos hacen imaginar todo lo que pudieron vivir las paredes del castillo.
Alcalá del Júcar es uno de los pueblos más espectaculares de la provincia de Albacete y fue declarado Conjunto Histórico Artístico. ¿Todavía no lo conoces?
-
Castillo de Almansa (Albacete)
Es uno de los castillos mejor conservados de la provincia de Albacete. Algo que debemos destacara es su torre del homenaje que se encuentra en una situación muy elevada y también la escalera de caracol, que conduce a lo más alto de torre y que pertenece al estilo gótico.
Está situado sobre el Cerro del Águila, un lugar desde el cual se puede disfrutar de las mejores vistas de la ciudad. Declarado en 1921 como Monumento Histórico Artístico Nacional, se ha convertido en una visita obligada para aquellos amantes de la antigüedad y de nuestra historia y cultura.
-
Castillo de la Estrella o de Montiel (Ciudad Real)
Es el escenario principal de la conocida Tragedia de Montiel. Uno de sus mayores encantos es su localización y el paisaje que se visualiza de sus ruinas. Se puede acceder libremente, aunque lo más recomendable es apuntarse a los grupos de visita guiada que organiza la Biblioteca de Montiel.
-
Castillo de Alarcón (Cuenca)
El Castillo de Alarcón está situado en la provincia de Cuenca y es una auténtica fortaleza medieval atribuida al rey Alfonso VIII. Más tarde fue reformado por el Infante Don Juan Manuel y el Marqués de Villena.
Llama la atención su gran volumen y la forma en la que se une a la piedra del resto de la muralla que rodea la ciudad, lo que la convierte en una obra histórica-artística resistente y consolidada.
-
Castillo de Atienza (Guadalajara)
Situada a una gran altura, este castillo es regalo para aquellos que disfrutan con los paisajes desde zonas muy elevadas. Su torre se encuentra sobre una roca desde la que podemos ver vistas panorámicas desde Sistema Central y toda la meseta.
Lo que mejor ser conserva es su torre del homenaje y el personaje que más lo representa es Alfonso VIII, de ahí la celebración cada año de La Caballada de Atienza el domingo de Pentecostés.
-
Castillo de Consuegra (Toledo)
Perfectamente restaurado, se puede visitar su interior y ver el mobiliario y las armas que nos trasladan a la época de su surgimiento.
Se dice que pudo ser una torre de vigilancia en sus principios, y que posteriormente quedó en estado de ruina hasta que empezó a remodelarse en los años 60 por la escuela-taller de Consuegra.
Si quieres conocer curiosidades o más datos sobre la historia de estos castillos, sólo tienes que acceder a la web de cada uno de ellos, dónde podrás encontrar más información sobre el turismo de la zona, además de conocer los horarios de apertura y cierre de cada uno de ellos.
