Castilla-La Mancha cuenta, por ahora, con un total de 14 rutas turísticas accesibles. Turismo sin barreras que permite que las personas con movilidad reducida o algún tipo de discapacidad puedan disfrutar los recursos turísticos de nuestra región.
Estos recorridos inclusivos se enmarcan en el programa ‘Turismo Accesible’, puesto en marcha por el Gobierno de Castilla-La Mancha. Gracias a esta iniciativa, las personas con discapacidad pueden adentrarse en bosques, pasear por castillos medievales, museos y descubrir el rico y variado patrimonio con el que cuentan las cinco provincias. Algo que hasta ahora era complicado.
Rutas turísticas accesibles por provincias
A través de la página web de Turismo Accesible de Castilla-La Mancha, se pueden consultar todas las rutas disponibles.
- Albacete es una ciudad accesible para los viajeros en silla de ruedas. Uno de las rutas turísticas inclusivas transcurre por los lugares más emblemáticos de la ciudad, como la Catedral, la Posada del Rosario, el Parque Abelardo Sánchez, el Museo Municipal, el Museo de la Cuchillería o el Jardín Botánico.
Otro de los recorridos, permite descubrir algunos de los preciosos enclaves naturales con los que cuenta la provincia. Entre ellos, el sendero de los Calares del Río Mundo y de la Sima, en Riópar, donde contemplar el nacimiento del río Mundo; y Alcalá del Júcar, considerado uno de los pueblos más bonitos de España.
Almansa, a través de la Ruta de la Lana, para descubrir lugares como el Museo de la Batalla, el Palacio de los Condes de Cirat y la Iglesia de la Asunción, forma también parte de este programa de turismo accesible.
- Ciudad Real ofrece al visitante en silla de ruedas la posibilidad de descubrir su núcleo urbano, a través de un paseo por sus calles; su patrimonio cultural, haciendo un alto en lugares como el Museo Provincial, las iglesias de San Pedro y Santiago, la Puerta de Toledo y el Museo del Quijote; y su provincia. Visita obligada son las localidades de Almagro, Villanueva de los Infantes, Daimiel y Almadén.
- Cuenca y su provincia tienen mucho que ofrecer en cuanto a posibilidades turísticas accesibles se refiere. Una ruta por la propia ciudad; por sus castillos medievales, como el de Alarcón o el de Belmonte; lecciones de historia a través del Museo Paleontológico de Castilla-La Mancha (MUPA), de las Pinturas Murales de Alarcón o del Monasterio de Uclés; o respirar aire puro en el Parque Natural de la Serranía de Cuenca. Ver el nacimiento del Río Cuervo y visitar el Parque Cinegético de El Hosquillo son otros de los planes inclusivos que pueden realizarse en Cuenca.
- Guadalajara propone al visitante una ruta por el Viaje a la Alcarria, de Camilo José Cela, y descubrir todos los tesoros que la comarca de La Alcarria esconde a través de municipios como Brihuega, Torija, o Pastrana. Naturaleza e historia se funden en una simbiosis perfecta para deleite de los turistas.
- Toledo, declarada Patrimonio de la Humanidad desde 1986, es una visita obligada. Tanto el propio núcleo urbano, como su provincia son una maravilla por descubrir. San Martín de Montalbán, Tembleque, Consuegra y sus tradicionales molinos de viento, que ya Don Quijote confundía con gigantes, La Puebla de Montalbán y Talavera de la Reina son algunas de las localidades que el viajero en silla de ruedas podrá visitar sin complicaciones.
Tal y como han anunciado desde el Gobierno regional a estas rutas turísticas accesibles se irán sumando nuevos recorridos.
